¡Woidke, de Brandeburgo, exige una compensación por las pérdidas fiscales inminentes!

Transparenz: Redaktionell erstellt und geprüft.
Veröffentlicht am

Brandeburgo exige una compensación por las pérdidas fiscales mediante la desgravación fiscal prevista, que se aplicará a partir de julio de 2025.

Brandenburg fordert Ausgleich für Steuerausfälle durch geplante Steuererleichterungen, die ab Juli 2025 gelten sollen.
Brandeburgo exige una compensación por las pérdidas fiscales mediante la desgravación fiscal prevista, que se aplicará a partir de julio de 2025.

¡Woidke, de Brandeburgo, exige una compensación por las pérdidas fiscales inminentes!

Con una señal clara a los políticos, el primer ministro de Brandeburgo, Dietmar Woidke, acogió con agrado el programa de inversión fiscal previsto por el gobierno federal. Pero el llamamiento no es sólo una palmadita amistosa en la espalda: Woidke pide una compensación por las pérdidas financieras que sufrirán los gobiernos federal, estatal y local debido a la esperada reducción fiscal. En un anuncio oportuno, explicó que la desgravación fiscal específica para las empresas podría dar lugar a una reducción de los ingresos de unos 48.000 millones de euros hasta 2029. Una parte considerable de esto (unos 30.000 millones de euros) recaería en los estados y municipios, lo que supondría una presión considerable para la situación financiera de las administraciones regionales. Según Woidke, es importante que los impulsos de crecimiento de la economía no se produzcan a expensas de las finanzas municipales.

Su atención se centra claramente en las inversiones en infraestructura de los estados y municipios. Por ello, Woidke apoya una propuesta de resolución para modernizar la cogestión empresarial y ve la necesidad de revisar la Ley de Constitución de Empresas. Estas medidas son particularmente importantes para hacer frente a los desafíos de la digitalización y la inteligencia artificial. Para él es importante contar con una base sólida para los derechos de los empleados y la colaboración social.

Recortes de impuestos e impulso a la inversión

A nivel federal, el Ministro Federal de Finanzas, Lars Klingbeil (SPD), presentó un proyecto de ley para amplios recortes fiscales e incentivos a la inversión, que entrará en vigor a partir de julio de 2025. El núcleo de estas medidas es un "impulso de la inversión" planificado, en virtud del cual las empresas pueden reclamar una depreciación especial de hasta el 30 por ciento para determinadas inversiones entre 2025 y 2027. Esto proporcionará una generosa desgravación fiscal desde el 1 de julio de 2025 hasta el 1 de enero. 2028, que, entre otras cosas, reducirá el impuesto de sociedades del 15 por ciento actual al 10 por ciento a partir del 1 de enero de 2028. Estas desgravaciones fiscales tienen como objetivo fortalecer la competitividad de Alemania como lugar de negocios.

Pero el entusiasmo va acompañado de una gran cautela. segun eso ZDF Las pérdidas fiscales podrían ascender a 630 millones de euros en 2025, 4 mil millones de euros en 2026 y crecer hasta 17 mil millones de euros en 2029. Estos fracasos no sólo afectan al gobierno federal, sino también a los estados y municipios. Por tanto, es esencial diseñar las medidas de tal manera que no conduzcan a una sobrecarga de los presupuestos municipales.

Los desafíos para las empresas

La Asociación de Cámaras de Industria y Comercio Alemanas (DIHK) destaca especialmente que el impuesto de sociedades en Alemania, superior al 30 por ciento, es relativamente alto en comparación con otros países. El promedio de la OCDE es de alrededor del 23 por ciento, mientras que el promedio de la UE es del 21,1 por ciento. Estos elevados impuestos y los obstáculos burocráticos asociados dificultan que muchas empresas emergentes y medianas empresas innovadoras adquieran capital y permanezcan en Alemania. A menudo tienden a invertir en países con condiciones más atractivas, lo que podría poner en peligro la base económica de Alemania a largo plazo.

La última reforma tributaria significativa tuvo lugar en 2008 y las condiciones han cambiado significativamente desde entonces. Para reforzar la competencia, las cámaras han desarrollado propuestas para el impuesto de sociedades que, entre otras cosas, quieren reducir el impuesto de sociedades a un máximo del 25 por ciento y suprimir inmediatamente el recargo de solidaridad. Las cámaras esperan que la desgravación fiscal y los incentivos a la inversión conduzcan a una recuperación económica, al desarrollo de nuevas capacidades y, en última instancia, a nuevos puestos de trabajo.

La pregunta sigue siendo: ¿Cómo responderá la política a los desafíos y demandas? Los próximos meses probablemente serán apasionantes porque hay mucho en juego para el futuro de la economía alemana y de las comunidades locales.